La
valoración de una empresa en el entorno digital viene definida por diversos parámetros.
Uno de los que están adquiriendo más peso y se acostumbra a traducir en más
valor en bolsa es el valor de la marca. Las políticas de branding, es decir, de construcción de una marca (brand equity), se sitúan en la pole position de las acciones de
marketing.
Además, esa
creación de marca va de la mano de las acciones en medios sociales. La oleada
de cloud journalism y social journalism commerce promueve la
marca como eje estratégico en una acción continuada en medios y redes sociales.
Como precios y productos tienden a commoditizarlo
todo, para una empresa una fórmula de diferenciación consiste en forjar una
marca sólida. El valor, la credibilidad y la singularidad de una marca es un
intangible preciado. Cada vez más usuarios compran una marca, no un producto o
un servicio concretos. Y ese prestigio de marca se debe cuidar, ya que puede
devenir vulnerable.