La Sociedad
de la Banda Ancha, caracterizada por la universalización del acceso a la
red y su carácter garantizado, se configura priorizando los contenidos y la
posibilidad de crear comunidades homogéneas, con engagement en sus miembros, uno a uno, agrupándose triunfales como los troncos de la fotografía, al efecto de facilitar el intercambio
de conocimiento. Si se trata de un medio de comunicación, entramos entonces en
el social
journalism commerce, un potosí a efectos de monetización
y de customización del usuario final.
Para los que nos dedicamos a la docencia universitaria,
los medios y las redes sociales son un aliado, no un enemigo. Es cierto que en
algunos entornos se observa a las nuevas (o no tanto) herramientas digitales
como una amenaza que furtivamente se introduce en el día a día de las aulas. Pero
más que amenaza las redes sociales son una oportunidad, una opción de conectar
con los estudiantes, de interactuar con ellos, de hablar su mismo lenguaje. Hoy
en día, dar clase es como un partido de fútbol: hay que “ganar y dar
espectáculo”, es decir, explicar muy bien y mantener entretenida a la
audiencia. Y eso requiere vocación, arte y en ocasiones un pellizco de paciencia.