Mostrando entradas con la etiqueta Internet of things. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Internet of things. Mostrar todas las entradas

domingo, 31 de agosto de 2014

El Internet de las cosas o la cosificación digital



La Sociedad de la Banda Ancha cabalga hacia la panconectividad: conexión universal a la red, y conexiones de todo y de todos a ella. Las herramientas de geolocalización conducen a una ucronía en la que, como contrapunto a las ventajas de la digitalización, nos imaginamos un futuro en el que cualquier ente lleve un microchip incrustado y sea controlable por una suerte de gran hermano integrado por la alianza entre creadores de contenidos y operadores de telecomunicación.
Esa idea lleva al extremo unos sanos pasos de conectividad que envuelve a cada vez más objetos: gafas, frigoríficos, máquinas expendedoras, vehículos, televisores, lavadoras o incluso ropa. Un dispositivo sin conexión aparece capitidisminuido. En todo caso, el Internet de las Cosas (Internet of Things) se está exagerando, según Gartner.


sábado, 1 de febrero de 2014

Todos (y todo) conectados

Todos (y todo) conectados. Ese escenario será una realidad en pocos años. En 2020, según Gartner, el número de PCs, tabletas y smartphones se situará alrededor de los 7.300 millones de unidades. En cambio, el IoT o Internet of Things (la red de objetos conectados) amasará 26.000 millones (900 millones contabilizados en 2009). Los suministradores de productos y servicios en este segmento conseguirán un plus de 300.000 millones de dólares de ingresos.
Como añadir conectividad a los productos de consumo es barato (será una funcionalidad estándar), Gartner apuesta por un crecimiento de los dispositivos fantasma (ghost): contarán con conexión pero no obtendrán rendimiento de ella.  
¿Y por qué esa falta de provecho? Porque, pese a que incluyan de serie la capacidad conectora, requieren software que la active per se o por los usuarios la  ponen en marcha. Las empresas utilizarán intensivamente el Internet de las Cosas. Las estrategias de comunicación y de marketing pivotarán sobre ello. Productos cuya colocación conectada proliferarán son sistemas de monitorización, dispositivos periodísticos, dispositivos médicos, sensores y aplicaciones automatizadas en la industria robótica, agricultura o transporte (utilities, sobre todo), lo que aporta control remoto, monitorización y detección.
Por tanto, conectividad, always on y Unified Communications al poder, características esenciales de la Sociedad de la Banda Ancha (Periodismo + Telecomunicaciones). Así lo analizamos en el Grupo de Investigación sobre Periodismo Digital y Banda Ancha, de la UAO-CEU y el CECABLE, en Twitter (@CECABLEresearch), Google+, en el grupo de LinkedIn, en la página de LinkedIn, en el grupo de Facebook y en este blog. Y ahondaremos en las XIX Jornadas del Cable y la Banda Ancha en Cataluña (6-8 de mayo de 2014).

sábado, 22 de diciembre de 2012

Buenas perspectivas para el PLC

Cuando se explican los tipos de redes de telecomunicación, lo más habitual es que en último lugar, y como rara avis, aparezca el PLC (Power Line Communications). Este tipo de tecnología utiliza la red eléctrica del hogar para convertirla en una red de datos y para ofrecer un servicio similar al del xDSL, basado en el par de cobre telefónico. El espíritu comercial también se asemeja al del xDSL: aprovechar una línea ya instalada y con gran alcance (la telefónica, la eléctrica) para ofrecer una puerta hacia de Sociedad de la Banda Ancha. 
Las primeras experiencias europeas de PLC se llevaron a cabo en Alemania y en España (Palma de Mallorca y Zaragoza). El Broadband over Power Lines permite llevar Internet al hogar. Las previsiones de MarketWatch son halagüeñas para esta tecnología, que evolucionará desde los 2.940 millones de dólares en 2013 hasta los 7.100 millones de dólares en 2018 (crecimiento medio anual del 19,3%), lo que avala una conectividad a menor precio y con  mayor rendimiento.
Inicialmente el PLC era un recurso para que Internet llegara a los puntos del hogar sin acceso Wi-Fi o con acceso lento. Ahora, hasta los sistemas de automatización del hogar y las comunicaciones M2M (machine-to-machine), la base del Internet of things, se benefician de esta tecnología. 
Si Europa fue el early adopter del PLC, Estados Unidos supone ahora el mayor mercado. En la región  Asia/Pacífico, China y Japón incorporarán el PLC a una media del 23% entre 2012 y 2018. Por unidades, el mercado saltará de 39,90 millones de unidades de adaptadores PLC en 2013 a 417,16 millones en 2018 (crecimiento medio anual del 60,7%). Con estos datos en la mano, quizá en poco tiempo el PLC dejará de ser la última tecnología en explicarse...

martes, 20 de noviembre de 2012

6,58 dispositivos electrónicos con conexión a Internet por persona


Estamos muy internetizados. La Sociedad de la Banda Ancha, que pregona la universalización de la banda ancha, su carácter garantizado y la cooperación entre los operadores de telecomunicaciones y los medios de comunicación (micropayments y otras vías), cabalga al ritmo de la red de redes. En ese escenario, la Internet of things, la Internet de las cosas, acumula gran cantidad de dispositivos conectados. Y la tendencia va al alza, como pronosticamos desde CECABLE.
De hecho, la principal fuente de conexiones a la red es el M2M (Machine to Machine), es decir, máquinas conectadas a la red, con su IP correspondiente. De ahí procede la necesidad del cambio de IPv4 a IPv6, que concederá margen de maniobra a la industria tecnológica y a la de contenidos. En todo caso, las cifras de dispositivos conectados se disparan.
Así, al socaire del incremento de ventas de smartphones y tabletas, la Consumer Electronics Association  prevé que se alcancen los 50.000 millones de dispositivos conectados en uso en 2020. Ello supondrá que, por cada habitante en el mundo, existirán 6,58 dispositivos electrónicos con conexión a Internet. En 2003 se registraron 500 millones de dispositivos con conexión (0,08 por habitante); en 2010, la se alcanzaron los 12,5 mil millones de aparatos (casi dos por habitante). Las previsiones son que la demanda siga aumentando hasta los 3,47 aparatos por habitante en 2015. Los 6,58 aparatos en 2020 dispositivos serían el zenit de esa progresión. 
Las consecuencias negativas del ascenso de smartphones y tabletas afectan a la venta de aparatos de control remoto y MP3, la industria del automóvil y la atención médica. Curiosamente, de cara a Navidades, el 8,3% de los estadounidenses quiere como regalo una tableta por encima de todo. Internetización total.